Esta nota fue traducida al español y editada para mayor claridad a partir de una versión en inglés publicada en The Nevada Independent.

La Asociación de Educación del Condado Clark (CCEA, por sus siglas en inglés) ha llegado a un acuerdo tentativo con el Distrito Escolar del Condado Clark para un plan de reapertura en el que los niños más pequeños serían los primeros en regresar a los salones de clase.

¿Lo que aún no se sabe? Qué tan pronto podría suceder.

El memorando de acuerdo se presentará ante la Mesa Directiva Escolar del Condado Clark en una reunión programada para este 14 de enero, lo cual no significa una transición inmediata a las clases presenciales.

El superintendente del Condado Clark, Jesús Jara, dijo que el mejor caso para recibir de regreso a los estudiantes es en algún momento de febrero.

"Los funcionarios científicos y médicos dictarán cuando llegue ese día", dijo.

Pero aun sí, el regreso a clases presenciales solo será una opción para alumnos de preescolar a tercer grado. John Vellardita, director ejecutivo del sindicato de maestros, describió el acuerdo como un "enfoque incremental" que le da flexibilidad al distrito con base en cómo le vaya a la transición desde el punto de vista de la salud.

Tal como está ahora, solo los estudiantes con necesidades de educación especial que están en esos grados inferiores regresarían inicialmente, dijo Jara. Los demás permanecerían en modalidad de educación a distancia.

Tampoco está claro si los alumnos de preescolar a tercer grado reanudarían el aprendizaje en persona cinco días a la semana o bajo un modelo híbrido de medio tiempo. Jara dijo que el distrito todavía no ha tomado esa decisión.

Los líderes del distrito y del sindicato dijeron que el acuerdo tiene protocolos de seguridad basados en la guía del Distrito de Salud del Sur de Nevada y los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, que incluyen detección diaria de síntomas, prueba mensual COVID-19, seguimiento de contactos, y equipo de protección personal para todos los empleados.

La prueba obligatoria solo se aplicaría a los educadores, no a los estudiantes, dijo Fikisha Miller, negociadora principal del distrito y asistente del abogado general.

El plan también incluye una excepción para educadores que cumplen con la definición del estado de una "población vulnerable" con mayor riesgo de complicaciones del COVID-19.

El distrito dará prioridad a las solicitudes de teletrabajo para los maestros que entren en esa categoría, como personas de 65 años o más, embarazadas, inmunodeprimidas o con enfermedad pulmonar crónica, asma moderada a grave, o una enfermedad cardíaca grave.

“Creo que este es un acuerdo inteligente”, dijo Vellardita. “Creo que refleja lo que está pasando a nivel nacional. Tenemos que adoptar este tipo de enfoque y ver qué funciona y ser capaces de modificar y cambiar".

El personal continuará trabajando a distancia al menos hasta el 15 de enero, según la solicitud del gobernador de que los habitantes de Nevada se queden en casa tanto como sea posible para frenar la propagación del COVID-19.

El Distrito Escolar del Condado Clark ha estado operando bajo aprendizaje remoto desde que el coronavirus provocó los cierres iniciales a mediados de marzo. Ha aumentado la presión, tanto a nivel local como nacional, para que las escuelas vuelvan a abrir, especialmente porque la evidencia indica que los estudiantes se están retrasando académicamente.

El mes pasado, los funcionarios del distrito elaboraron un plan de transición hacia las clases en persona, pero la Junta Escolar del Condado Clark presentó una votación sobre el asunto en medio de los crecientes casos de COVID-19.

El distrito sigue en negociaciones con otros grupos de empleados acerca de los planes de reapertura.

La aprobación del acuerdo con el CCEA recaerá en una junta escolar que se acaba de renovar ampliamente. Tres miembros recién electos, Katie Williams, Lisa Guzmán y Evelyn García Morales, prestarán juramento este 4 de enero.