Esta nota fue traducida al español y editada para brevedad a partir de una versión en inglés.

La misión de la Guardia Nacional de Nevada para apoyar la respuesta del estado al COVID llegará a su fin el 1 de abril, exactamente dos años después de que empezó.

Desde el pico de activación en abril de 2020, la Guardia de Nevada ha reducido gradualmente la cantidad total de personal que realiza operaciones derivadas de la pandemia para así preparar a las jurisdicciones locales hacia una transición en sus actividades continuas de pruebas, vacunación y rastreo de contactos.

En su cúspide, se convocó a 1,139 miembros de la Guardia de Nevada para apoyar al estado, lo que fue la respuesta de emergencia doméstica más grande de su historia. También fue la activación estatal más prolongada desde la Segunda Guerra Mundial; con miembros de la Guardia que permanecieron bajo órdenes durante más de 700 días.

“La Guardia de Nevada nunca ha estado más ocupada o más visible que en los recientes dos años”, dijo este jueves Emerson Marcus, oficial de asuntos públicos estatales de la Guardia Nacional de Nevada durante una llamada de actualización COVID-19 de Nevada Health Response.

Esta acción de la Guardia de Nevada es la señal más reciente de la relajación gradual del estado en cuanto a las precauciones y políticas relacionadas con brotes COVID. El estado recientemente pasó de ofrecer reportes de datos COVID diarios a semanales, y el mes pasado el Gobernador Steve Sisolak anunció el fin del mandato de cubrebocas en el estado.

En total, los guardias de Nevada administraron directamente 831,227 pruebas COVID-19 y 818,661 vacunas. También brindó apoyo para transportar casi cuatro millones de libras de equipo de protección personal en el estado, señaló Marcus.

El Coronel Brett Compston, director de Operaciones Conjuntas y Domésticas de la Guardia Nacional de Nevada dijo que en caso de otro aumento u ola de COVID, podría haber una reactivación con “simplemente una orden y algunos fondos”.

“No puedo enfatizar esto lo suficiente, la Guardia de Nevada permanece lista y capaz de ayudar a los habitantes de nuestro estado cuando se les convoque nuevamente si es necesario que se les vuelva a llamar”, agregó Marcus

Sisolak convocó por primera vez a 106 soldados y aviadores por órdenes militares estatales el 6 de abril de 2020, dos días después de que el ex Presidente Donald Trump aprobó la declaración de desastre mayor del estado y concedió fondos federales adicionales.

Marcus afirmó que todos los que sirvieron como parte de la Guardia Nacional de Nevada han brindado un "ejemplo brillante y un camino a seguir a través de estos dos años turbulentos".

“Esta es probablemente la mayor crisis que hemos enfrentado en los últimos 100 años”, dijo Compston. “Y todos los miembros de la Guardia a quienes se les pidió que dieran un paso al frente, lo hicieron. Creo que eso es lo que realmente aprendimos — brindar un servicio desinteresado y dar apoyo a nuestra comunidad”.