'Somos un campus seguro': UNLV reanudará clases en sitio del tiroteo ocurrido en 2023
Esta nota fue traducida al español y editada a partir de una versión en inglés.
Cuando los estudiantes de la Universidad de Nevada, Las Vegas (UNLV) regresen a clases al Frank y Estella Beam Hall en dos semanas, nada se debería ver muy diferente en comparación al pasado diciembre — antes de que el edificio cerrara luego de un tiroteo que dejó tres profesores muertos y otro gravemente herido.
La universidad ha trabajado para borrar cualquier rastro de daños materiales después del tiroteo y se ha esforzado para que estudiantes, profesores y personal se sientan más cómodos en el edificio y evitar traumatizarlos de nuevo, dijo Musa Pam, vicepresidente asociado de administración de instalaciones, durante una conferencia de prensa el martes. Esa fue la primera vez que el edificio abrió sus puertas al público desde el tiroteo.
En este otoño se impartirán 160 clases en Beam Hall, casi la mitad de las que generalmente se ofrecerían. Un portavoz de UNLV dijo que cada una de las clases programadas en Beam Hall también estarán disponibles en otro edificio del campus para estudiantes que todavía se sienten incómodos dentro de las instalaciones.
Arnold Vasquez, director interino de los Servicios de Policía Universitaria, Comando Sur, y Pam, compartieron las mejoras de seguridad, que incluyen:
- Cámaras de vigilancia fuera de los elevadores en todos los pisos
- Teléfonos nuevos con capacidades mejoradas de notificación de emergencia. Los teléfonos están fijos en las paredes de los salones para no interrumpir a los maestros
- Agentes de seguridad armados que estarán en el primer y segundo piso.
Otro cambio es que ahora solo se podrá acceder a los pisos tercero, cuarto y quinto, donde están las oficinas de los profesores, a través de escaleras o elevadores utilizando una tarjeta de acceso.
Las nuevas medidas de seguridad se combinan con una “presencia mayor y más reforzada” de la policía universitaria con patrullajes continuos.
“Somos un campus seguro”, dijo Vasquez. “Esta es una isla de seguridad. Estamos aquí para proporcionarles eso”.
UNLV ha gastado cerca de $2.5 millones de dólares en reparaciones y actualizaciones de seguridad en todo el campus, incluyendo Beam Hall, y $1 millón adicional en los últimos meses para mejorar la iluminación en toda la universidad, dijeron funcionarios en un comunicado el martes.
El Sistema de Educación Superior de Nevada está utilizando $2.6 millones en fondos de subvención para mejoras de seguridad en toda su institución, lo que incluye a agentes de seguridad privados para Beam Hall.
El Presidente de UNLV, Keith Whitfield, señaló que, en 2025, planea solicitar a la Legislatura $38 millones de dólares en fondos para mejoras adicionales de seguridad.
Pero incluso si estas nuevas medidas de seguridad se hubieran implementado antes del tiroteo, Whitfield agregó que no cree que hubieran prevenido el incidente.
“Lamento decir eso”, comentó Whitfield. "Decir que algo pudiera haber detenido a alguien que vino a hacer el mal, es muy, muy difícil".
Después del tiroteo, se sugirió que UNLV cerrara el campus a todos los visitantes, pero Whitfield descartó esa idea y explicó que eso no es factible para una institución de investigación urbana como UNLV y que además "no es un elemento de impedimento tan significativo como se podría pensar".
Vasquez instó a las personas a comunicarse con las autoridades si ven o escuchan algo sospechoso.
"No nos molestará una llamada telefónica ... así que por favor llámenos", dijo Vasquez. “Es nuestro trabajo. Saldremos, lo atenderemos, lo resolveremos”.