Reporte: Nevada violó ley federal al internar innecesariamente a niños con problemas de salud conductual
Esta nota fue traducida al español y editada a partir de una versión en inglés.
Nevada ha fallado rutinariamente en brindar tratamiento y servicios adecuados a jóvenes con discapacidades de salud conductual, y ha dependido demasiado en instituciones como hospitales o centros residenciales de tratamiento en un grado que probablemente viola la ley federal.
Lo anterior según una investigación del Departamento de Justicia de los EE. UU. (DOJ), que el martes publicó un informe detallando la falla del estado para proveer "servicios comunitarios" (como terapia, o apoyo en crisis), lo que resultó en que cientos de niños fueran "aislados en centros de tratamiento residencial cada año", en lugar de permanecer con sus familias si existieran esos servicios.
Más de 1,700 menores de Nevada fueron admitidos en un hospital para recibir atención psiquiátrica en el año fiscal 2020, según el reporte, y más de 480 recibieron servicios en centros de tratamiento residencial. Pero una vez allí, “los niños se quedan por mucho tiempo”; un promedio de nueve a 12 meses en sitios residenciales y centros institucionales.
Más de una cuarta parte de los niños ingresados en estas instalaciones entre agosto y octubre de 2019 permanecieron más de un año.
Los niños atendidos en la comunidad suelen experimentar una disminución de síntomas clínicos, aumento de sus fortalezas emocionales, mejores resultados escolares y menos intentos de suicidio, señala el reporte. Por otro lado, el cuidado residencial está asociado con "daños significativos", que incluyen tasas más altas de abuso, retraso en el desarrollo y trastornos de apego emocional.
El informe concluye con la búsqueda de una "causa razonable" de que la falta de servicios por parte del estado constituyó una violación de la Ley de Estadounidenses con Discapacidades (ADA) y esto podría dar lugar a una demanda en busca de medidas correctivas.
Para que Nevada remedie su violación de la ADA, el informe estableció vías como asegurar que los servicios en la comunidad sean "accesibles y disponibles", ajustar procedimientos estatales para aumentar la cantidad de proveedores de Medicaid para la salud conductual de los niños, y trabajar con niños y padres en un plan de transición después de que sean dados de alta de las instalaciones de tratamiento, entre otros.
El Gobernador Steve Sisolak reconoció en un comunicado que la investigación del DOJ encontró que el estado "carecía" de servicios” y dijo que el gobierno estatal estaba "comprometido a trabajar con el gobierno federal y otros socios para resolver los problemas planteados en el reporte".
La declaración del gobernador también reiteró los millones en recursos federales asignados a Nevada que se habían destinado a programas relacionados durante el año reciente, y señaló que los fondos adicionales "ya se estaban incorporando a mi presupuesto recomendado" para el próximo bienio fiscal.
El reporte entrevistó a la madre de un niño de 14 años quien, al no poder obtener los tratamientos de salud conductual necesarios, fue admitido en cuatro hospitales diferentes durante varios años.
“Esta madre nos dijo que si hubiera sabido acerca de la falta de servicios de salud conductual en el estado, nunca habría mudado [a su hijo] a Nevada”, afirma el informe.
El documento del DOJ también describió las experiencias de un niño llamado Martin, “quien era apto para recibir servicios comunitarios, pero en cambio recibió tratamiento en dos centros residenciales”.
Después de experimentar abuso y ruptura familiar cuando era niño, Martin pasó por una hospitalización psiquiátrica a los 8 años, antes de permanecer ocho meses en un centro en Nevada, seguido de una estadía de siete meses en un centro en Colorado a casi 1,000 millas de distancia de su hogar, ubicado en Reno.
“Al ingresar a ese centro, comentó que su único deseo era 'no estar aquí'”, subraya el informe.