Esta nota fue traducida al español y editada para brevedad a partir de una versión en inglés.

El Estadio Allegiant, la casa de casi $2 billones de dólares de Las Vegas Raiders, será sede del Super Bowl (Super Tazón) de 2024, lo que traerá a miles de personas, y a sus bolsillos, a la capital mundial del entretenimiento.

Mark Davis, propietario de dicho equipo de fútbol americano, emitió un comunicado confirmando la noticia después de que fue aprobada durante una junta con propietarios de equipos de la NFL (National Football League) en Dallas este miércoles.

"Hemos sido galardonados con el Pro Bowl, el draft de la NFL y ahora el premio más grande de todos: El Super Bowl", dijo Davis, desde Dallas. "Cuando no estás ganando en el campo, a veces es agradable ganar, y hoy es una gran, gran victoria para todos nosotros".

El partido está programado para el 11 de febrero del 2024. Se espera que las marquesinas de la franja de casinos o Las Vegas Strip, Fremont Street Experience y otras áreas se iluminen a las 5 p.m. del miércoles para promocionar el anuncio.

En un comunicado de prensa, Steve Hill, director ejecutivo de la Autoridad de Visitantes y Convenciones de Las Vegas, calificó la noticia como un "momento decisivo en la historia de Las Vegas" y prometió que será "el espectáculo deportivo más electrizante de la historia".

Maurice Gallagher, director ejecutivo de Allegiant Air y presidente del comité anfitrión del Super Bowl de Las Vegas, proyectó que el juego generará $500 millones de dólares en beneficios económicos generales, con $70 millones en dólares de impuestos estatales adicionales.

El Super Bowl 2020 en Miami tuvo un impacto económico total de $571.9 millones para la economía local, según un informe aprobado por los comisionados de Miami Beach, aunque algunos economistas han objetado esos números.

El Gobernador de Nevada Steve Sisolak, quien como presidente de la Comisión del Condado Clark fue uno de los primeros patrocinadores y partidarios del estadio, dijo que el Super Bowl creará miles de empleos de tiempo completo y parcial, y generará millones de dólares de impuestos "que se reinvertirán en apoyo a nuestras comunidades locales".

Sisolak adelantó que habrá "festividades creativas" como parte de una experiencia de entretenimiento que durará varios días antes del juego. También señaló que los beneficios son más que financieros y que el evento brindará una "exposición mundial" que de otro modo no obtendría la ciudad.

Jeremy Agüero, director de operaciones y análisis de los Raiders, indicó no estar al tanto del precio de los boletos y que los organizadores están buscando otros mercados para hacer una comparación; aunque comentó: "Espero que alcancemos o superemos lo que ha sucedido en todas las demás ediciones del Super Bowl cuando se celebre aquí en Las Vegas".

En cuanto a cómo el evento deportivo creará empleos, Agüero señaló que se necesitará personal para planificación y remodelación del estadio, así como para realizar las festividades previas y el Super Bowl en sí.

Gallagher afirmó que el período de dos años es corto en relación con el aviso anticipado que reciben otras sedes, pero que Las Vegas está bien equipada para abordar los retos logísticos para realizar eventos a gran escala de manera segura.

"¿Qué es más grande que un Super Bowl?” dijo. “Esta ciudad ... está preparada para este tipo de cosas. No quiere decir que otras ciudades no lo puedan hacer, pero esto es a lo que nos dedicamos".

Riley Snyder y Michelle Rindels contribuyeron a este reporte.