Esta nota fue traducida al español y editada para mayor claridad a partir de una versión en inglés.

Las propinas juegan un papel importante en la compensación de muchos trabajadores de hospitalidad en Las Vegas, pero el proceso de imponer impuestos a dichos ingresos es el centro de una protesta constante de la Unión Culinaria.

En 2020, el Servicio de Impuestos Internos (IRS) — la agencia federal encargada de recaudar contribuciones tributarias — redujo lo que se conoce como tasas de asignación de propinas para adaptarse a la falta de servicios de hospitalidad durante el peor momento de la pandemia. La tasa define lo que se espera que ganen los trabajadores con las propinas y el IRS les impone impuestos sobre esa tasa.

Casi dos años después, el IRS aumentó esas tasas de asignación de un 50 a 60 por ciento más altas de lo que eran antes de la pandemia, lo que incrementó impuestos sobre el ingreso para los trabajadores; provocando recortes en el salario neto e incluso cheques con saldo de cero para algunos, indican trabajadores sindicalizados.

En febrero, cientos de esos empleados se manifestaron en Las Vegas refiriéndose a las tarifas como injustas e instando al IRS a incluir al sindicato en las negociaciones, tal como lo habían hecho en años anteriores. “Les debería dar vergüenza”, dijeron los asistentes a la marcha.

Trabajadores de casinos se están recuperando de los cierres comerciales por la pandemia y unas 10,000 personas de dicho sector no han regresado a su trabajo. Ahora, ellos se enfrentan a la inflación y los altos precios en gasolina y vivienda, dijo Ted Pappageorge, secretario y tesorero de la Unión Culinaria.

¿Qué es el acuerdo de tasa de asignación de propinas?

Son acuerdos voluntarios entre los empleadores donde se acostumbra dar propinas — como restaurantes y casinos — y el IRS. Las tarifas, que varían entre empleadores, puestos y turnos, se calculan a partir de los datos que da la empresa y proyectan la cantidad de propinas que los trabajadores pueden recibir en una hora.

Según el IRS, el acuerdo se utiliza para distribuir propinas a los empleados, de tal modo que se pueda garantizar que ganen el salario mínimo y se fomente el cumplimiento fiscal al simplificar la declaración de ingresos y propinas para los empleadores.

Todas las propinas en efectivo y no en efectivo que recibe un empleado se consideran ingresos y, por lo tanto, están sujetas a impuestos federales sobre la renta. Los trabajadores pueden optar por no participar en el acuerdo de tasa de asignación de propinas, pero deben hacer un seguimiento de sus propinas o arriesgarse a una auditoría.

¿Cómo funciona?

Si bien muchos clientes están acostumbrados a dar una propina a su mesero del 15 al 25 por ciento, el IRS asume una tasa de propina promedio del 8 por ciento. Dicha agencia espera que los empleados reporten propinas que sumen al menos 8 por ciento de las ventas brutas de alimentos y bebidas, y divide las propinas entre los trabajadores que atienden al público y los que están tras bastidores.

La profesora de derecho tributario de la Universidad de Nevada, Las Vegas (UNLV) Francine Lipman, dio este ejemplo: Si un restaurante gana $5,000 dólares en un período de pago, el 8 por ciento de sus ventas son $400. Si los empleados del restaurante que reciben propinas indirectas (como ayudantes de meseros y cocineros que reciben propinas por medio de compartirlas en lugar de recibirlas de los clientes) obtienen $100 en propinas; la parte del 8 por ciento de las ventas que los empleados que reciben propinas directas deberían recibir es de $300.

Pero algunos miembros de la Culinaria han dicho que los montos en dólares de sus cheques han disminuido drásticamente. Aretha Wilder, quien ha sido servidora de bebidas en el casino Flamingo durante 31 años, señaló que su primer cheque después de la nueva tasa de asignación de propinas mostró que ganaba $471 por 80 horas de trabajo, cuando en 2019 ganaba más de $800.

¿En qué van las negociaciones?

Según el acuerdo de determinación de tasas de propinas, el IRS generalmente revisará las tasas de propinas solo una vez al año, y el empleador o los trabajadores pueden solicitar que se apruebe una tasa más baja presentando una petición ante el IRS. El acuerdo tarifario actual es por tres años, indicó Pappageorge.

Como el aumento de la tasa de asignación de propinas también afecta la forma en que se les cobran impuestos a los trabajadores que reciben propinas, Pappageorge argumenta que el IRS no está cumpliendo la promesa del Presidente Joe Biden de no imponer nuevos impuestos a quienes ganan menos de $400,000 al año.

Pappageorge agregó que la Culinaria no ha tenido noticias de dicha agencia federal en respuesta a sus preocupaciones.

“Estos son empleados promedio que trabajan aquí en Las Vegas. Tienen buenos trabajos y se les han aumentado sus impuestos. Y creemos que este es el momento absolutamente equivocado para elevar los impuestos a las familias trabajadoras”, dijo Pappageorge a The Nevada Independent.