Líderes religiosos redoblan llamado para que Gobernador Sisolak vuelva a abrir las iglesias
Esta nota fue traducida al español y editada para mayor claridad a partir de una versión en inglés que aparece en The Nevada Independent.
Más de 200 pastores de Nevada y líderes parroquiales firmaron una carta este jueves para instar al Gobernador de Nevada Steve Sisolak a alterar las pautas de la Fase Uno y permitir los servicios religiosos en persona de más de 10 congregantes.
La carta es un seguimiento a una enviada a principios de este mes, en la que se calificó como "arbitraria" la prohibición de los servicios religiosos en persona.
Las iglesias se han unido a los esfuerzos generados en todo el estado y también le han presentado al gobernador propuestas de enmiendas a las directivas actuales relacionadas con los servicios religiosos bajo la primera fase de reapertura, que los limitan a formatos donde los congregantes permanezcan en sus autos.
"Estas cuidadosas pautas de seguridad propuestas por los pastores de Nevada proporcionan un mapa razonable para reanudar de manera segura y responsable los servicios religiosos en persona", dijo este jueves en un comunicado de prensa el Pastor Kristopher Dahir, quien también es concejal de la Ciudad de Sparks. "Insto al Gobernador y al comité LEAP [Panel Asesor de Empoderamiento Local] a considerar seriamente y adoptar algunas o todas las propuestas de los Pastores de Nevada".
Las enmiendas que se proponen detallan las pautas que los servicios religiosos estarían obligados a cumplir para mantener el distanciamiento social.
Enfatizando un "deseo de sacrificarse por los demás", la carta firmada por los líderes afirma que las instituciones religiosas entienden la necesidad de distanciamiento social y creen que sus pautas lo permitirán incluso si los nevadenses pueden asistir al culto en persona.
Las pautas propuestas incluyen reducir la ocupación máxima al 50 por ciento de la capacidad máxima de asientos, prohibir las filas, espaciar los asientos a seis pies de distancia y repartir productos desinfectantes a los asistentes.
Otras guías adicionales que, de acuerdo con los líderes religiosos se deberían alentar pero no se tendrían que requerir, incluyen exigir que los equipos del ministerio y las congregaciones usen cubrebocas y reemplazar con cajas empotradas en la pared la recolección manual de ofrendas que realizan los ujieres.