Este sábado Las Vegas fue el centro del ámbito Republicano cuando la mayoría de los aspirantes restantes de las elecciones primarias presidenciales de dicho partido y los principales Republicanos se dieron cita en el Venetian para la cumbre de liderazgo de la Coalición Judía Republicana (RJC) — un evento dominado por el tema de la guerra que se está gestando entre Israel y Hamás.

Ocho aspirantes presidenciales, incluido el expresidente Donald Trump, subieron al escenario, cada uno afirmando su apoyo total a Israel y reprobando protestas pro Palestina e incidentes antisemitas u hostiles hacia los judíos en campus universitarios de los Estados Unidos.

La mayoría de los candidatos se encontraron nuevamente al margen de una contienda primaria en la que votantes Republicanos se han unido a Trump.

Este sábado el Exvicepresidente Mike Pence anunció el fin de su candidatura a las elecciones primarias — una decisión precedida por bajos números en las encuestas.

Pence instó a los asistentes a elegir un representante que no cediera a los caprichos de una política exterior dominada por el populismo, una advertencia contra el aislamiento Primero Estados Unidos defendido y promovido por Trump en su campaña 2016.

Pence aún aparecerá en la boleta de las elecciones primarias del Partido Republicano de Nevada el 6 de febrero, con varios otros candidatos improbables que optaron por no participar en el caucus dirigido por el partido el 8 de febrero.

Pence, quien entró a la contienda defendiendo sus acciones para frustrar el intento de Trump de anular las elecciones, no aprovechó la oportunidad para mencionar al favorito Republicano por su nombre. Sólo una candidata que habló el sábado lo hizo — la ex embajadora de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Nikki Haley.

El tema de las secuelas del ataque de Hamás contra Israel el 7 de octubre y los preparativos para una invasión israelí en Gaza dominaron la cumbre de Las Vegas.

Aún así, ningún candidato hizo el esfuerzo de denunciar casos de antisemitismo dentro del Partido Republicano, incluida la asociación de Trump con el negacionista y supremacista blanco Nick Fuentes, o la adopción de las teorías de conspiración antisemitas por parte de la Congresista Republicana por Georgia Marjorie Taylor Greene.

Trump, Haley y DeSantis encabezan maratón de discursos

Aunque la cumbre del RJC fue claramente una plataforma para que los ocho candidatos presentaran sus argumentos, Trump aprovechó el evento más como si fuera un evento de campaña, agradeciendo a sus partidarios individuales, enfocándose en las elecciones generales, criticando al Presidente Joe Biden.

Trump mantuvo sus comentarios acerca de que el mundo era un lugar peligroso antes y después de su presidencia, y que solo él puede restaurar la seguridad.

El expresidente hizo eco de varias propuestas políticas adoptadas por sus rivales, incluida la revocación de visas de estudiantes para universitarios internacionales involucrados en protestas contra Israel. También prometió restablecer su veto a viajeros de países musulmanes e imponer una prueba ideológica para inmigrantes para garantizar el apoyo a los Estados Unidos e Israel.

Trump sostuvo que los judíos estadounidenses estuvieron más seguros durante sus cuatro años en el cargo y dijo: "No tuvimos ni un solo incidente". No mencionó que la masacre de judíos más mortífera en la historia de la unión americana ocurrió en el segundo año de su gobierno, cuando un hombre armado asesinó a 11 personas en una sinagoga de Pittsburgh.

Irán es un partidario de Hamás desde hace mucho tiempo, pero hasta el momento no hay evidencia directa de que planificó u ordenó el ataque de Hamás del 7 de octubre.

El Gobernador de Florida Ron DeSantis agregó que, bajo su administración, Florida se negaría a aceptar refugiados de la Franja de Gaza. El ataque de Hamás a Israel, dijo, subraya la necesidad de políticas más duras en la frontera entre los Estados Unidos y México, un ámbito político en el que DeSantis ha adoptado una posición de línea dura, prometiendo una acción militar inmediata, en caso de resultar electo.

Varios de los candidatos criticaron a rectores de universidades por lo que consideraron ambigüedades morales en declaraciones sobre la guerra, prometiendo recortar fondos federales a instituciones de educación superior.

Y mientras Trump, DeSantis y Haley recibieron múltiples ovaciones de pie, algunos candidatos menores batallaron por atraer la atención de los asistentes. Entre ellos se encontraba el exgobernador de Nueva Jersey, Chris Christie, y el Gobernador de Dakota del Norte, Doug Burgum.

Campañas presidenciales Republicanas se extienden por Las Vegas

El sábado por la mañana en el hotel y casino Treasure Island, DeSantis asistió a un desayuno organizado por el Club Republicano de Nevada y el Comité de Acción Política (super PAC) de apoyo Never Back Down — que han criticado respectivamente al Partido Republicano de Nevada por sus planes de realizar un caucus a pesar de que habrá un elección primaria administrada por el estado y también por cambiar las reglas del caucus presidencial del partido del 8 de febrero para supuestamente beneficiar al principal candidato, Trump.

Mientras Trump se preparaba para su propio evento del sábado por la noche en Las Vegas, DeSantis pidió a los asistentes que firmaran tarjetas de “compromiso con el caucus” y los alentó a conseguir que otros votantes hicieran lo mismo antes de febrero.

Varios votantes Republicanos que asistieron al evento del sábado expresaron confusión acerca de ambas elecciones, y algunos desconocían que habría primarias y caucus.

En su evento matutino, durante una conversación con su amigo de toda la vida, el exfiscal General de Nevada, Adam Laxalt, DeSantis hizo énfasis en la política exterior.