Carrera de autos F1 en Las Vegas: Surgen dudas sobre elevadas proyecciones económicas
Esta nota fue traducida al español y editada a partir de una versión en inglés.
El viernes pasado, Greg Maffei — presidente ejecutivo de Liberty Media, la empresa estadounidense propietaria de Fórmula Uno — hizo algo inusual: Pidió disculpas a los habitantes de Las Vegas.
"Apreciamos que tengan la paciencia y la voluntad de tolerarnos", dijo Maffei a KVVU Fox 5. “Vamos a generar cerca de $1.7 billones de ingresos en esta área. Así que no es sólo para beneficio de los aficionados que quieran ver [la carrera]. Esperamos que esto sea un gran beneficio económico para Las Vegas”.
Lo anterior tuvo lugar después de que, durante la mayor parte del 2023, obras relacionadas con la F1 obstruyeron las vistas del icónico Strip o franja de casinos y dejaron atrapados en el tráfico a decenas de miles de empleados de la zona hotelera.
La firma Applied Analysis proyectó que el evento generará un impacto económico de $1.3 billones de dólares, incluidos $966 millones en gastos anticipados de los visitantes.
Con ganancias procedentes de juegos de azar y apuestas, entretenimiento en vivo, alojamiento e impuestos al consumo, la firma sugirió que el evento produciría $87 millones en ingresos por impuestos compartidos entre el estado, el Condado Clark y varias jurisdicciones del sur de Nevada.
Pero con precios a la baja en los boletos y habitaciones antes del inicio oficial de la carrera este miércoles, el sur de Nevada pronto descubrirá si esas elevadas proyecciones corresponden a la realidad.
El Gran Premio de Las Vegas fue, por mucho, la carrera más cara del calendario de F1 este año. Un lugar básico en las tribunas para el fin de semana de tres días comenzó en $2,000, con acceso limitado a una zona única de pie cerca de la Esfera con un precio de $500. Los palcos lujosos costaban entre $4,000 y $5,000 dólares y los precios subieron a partir de ahí.
Algunos lugareños se opusieron a una oferta para los habitantes de Nevada el mes pasado, promovida como “a partir de $200”.
Un boleto para la carrera del sábado ahora cuesta $771, una disminución del 53 por ciento respecto al precio original. Las entradas para la ronda clasificatoria ahora cuestan $221, una caída del 80 por ciento respecto al precio original.
Aun así, la caída en los precios de las entradas no afectará los $37.6 millones de dólares estimados en impuestos al entretenimiento en vivo recaudados durante la carrera, dijo el martes el director de Applied Analysis, Brian Gordon.
A pesar del abaratamiento de las entradas y los enormes costos asociados con la construcción del circuito de 3.9 millas y otras amenidades, Maffei aseguró que la F1 espera obtener ganancias de la carrera.
Los organizadores de la carrera han tratado de restar importancia a los problemas de la demanda. En una conferencia telefónica el 3 de noviembre, la Directora Ejecutiva del Gran Premio de Las Vegas, Renee Wilm, prometió a inversionistas que las entradas se iban a agotar antes de que se apaguen las luces.
Más allá de la demanda de boletos y las proyecciones económicas, algunos críticos han dicho que pocos análisis incluyeron el costo de la construcción en el Strip y sus alrededores, especialmente para negocios más pequeños que han visto una baja en su número de clientes.
Esos críticos incluyen al exgobernador Steve Sisolak, quien, desde que fue presidente de la Comisión del Condado Clark, participó en conversaciones para traer Fórmula Uno a Las Vegas.
Ahora, Sisolak — aunque "esperanzado" por el impacto económico de la carrera — "no confía en absoluto" en que las estimaciones iniciales sean acertadas.
"Nadie organiza una fiesta como lo hace Las Vegas, pero no creo que ningún otro circuito de carreras haya enfrentado los mismos retos que nosotros estamos enfrentando con este”, dijo Sisolak.