Esta nota fue traducida al español y editada y adaptada a partir de una versión en inglés.

El jueves pasado un grupo de fanáticos del equipo Leones de Detroit levantaron sus cervezas para brindar por el primer miembro de ese equipo en la primera ronda de la reunión anual de selección de jugadores o Draft de la Liga Nacional de Fútbol americano (NFL, National Football League): El corredor de punta de la Universidad de Michigan, Aidan Hutchinson.

Los cinco fanáticos estaban en una plaza afuera del Caesars Forum Conference Center, a cientos de metros del escenario y local donde se estaba llevando a cabo el draft.

Darrell Kaltz dijo que llegaron unos días antes del evento. Rodeados de miles de fanáticos vieron el draft en televisores de pantalla gigante. Los más de un millón de pies cuadrados al este del área de casinos o Strip fueron declarados por los ejecutivos de la NFL y líderes turísticos de Las Vegas como el centro temporal del universo del fútbol americano profesional.

Eso es exactamente lo que había esperado la Autoridad de Visitantes y Convenciones de Las Vegas para el Draft de la NFL, que consiste en tres días y siete rondas; así como de la NFL Draft Experience, un festival con juegos interactivos, sesiones de autógrafos con celebridades y entretenimiento en vivo.

El evento, que atrajo a varios cientos de miles de visitantes y fanáticos del fútbol americano de todo el país, es un ejemplo del tipo de actividades en persona y de alto perfil que están regresando a la normalidad después de los cierres por COVID y limitaciones de capacidad.

Con el Draft de la NFL terminó un calendario de importantes eventos deportivos que este año llegaron a Las Vegas, como el NFL Pro Bowl y el juego de las estrellas del hockey NHL All-Star Game; además de varios torneos de baloncesto, y un fin de semana con tres carreras automovilísticas de NASCAR.

Parte de la euforia que rodeó al draft en Las Vegas fue su designación como el primero a gran escala de la liga desde 2019 en Nashville. El evento del 2020 en Las Vegas se canceló debido a la pandemia y se realizó virtualmente. Luego, las restricciones de salud y seguridad redujeron el draft del año pasado en Cleveland.

La gerente general de Linq Promenade en Las Vegas, Tonia Chafetz, dijo que los restaurantes, bares y otros lugares dentro de dicha área comercial a menudo ven una actividad sólida durante eventos que atraen a visitantes enfocados en deportes y entretenimiento, como el torneo de baloncesto March Madness NCAA.

“Esta es la primera vez que hemos tenido un evento así de cerca de nosotros”, dijo Chafetz sobre el draft y la experiencia para los fanáticos que se llevó a cabo justo detrás del Linq. “Lo que escucho de nuestro equipo es que los números son muy similares a March Madness”.

Chafetz dijo que el negocio en el Linq está impulsado por el viajero independiente que está “aquí para relajarse y divertirse” y que el Draft de la NFL proveyó “la audiencia perfecta para Linq”.

Atuendos coloridos

Para Mike, Nick y Jim Paolini, de Buffalo, Nueva York, el viaje a Las Vegas representó su asistencia número 21 a un Draft de la NFL. Hace años Mike vivía en Londres y regresó a los Estados Unidos para no perderse uno de esos eventos.

El grupo de Kaltz lució camisetas y gorras de los Leones de Detroit; mientras que la familia Paolini se puso ropa de los Buffalo Bills. Pero esos atuendos fueron muy conservadores en comparación con otros.

Charles Sandoval, del sur de California, parecía un luchador profesional con una camiseta de Los Cargadores de Los Ángeles, lució pintura facial azul y dorada y pelo parado de color azul brillante.

Annette y Mike Dearing, super fanáticos de los Bucaneros de Tampa Bay, planearon los atuendos para cada día. Annette comenzó con una vestimenta de pirata, mientras que Mike lució una gran peluca naranja, un gran cinturón, y no se puso camisa sino una chaqueta roja de dicho equipo.

“He reprogramado cirugías para que no entren en conflicto con los días de juego”, dijo acerca de su lealtad al equipo. Annette señaló que le ha dicho a su familia que no programe grandes eventos, “como bodas”, en los días de juego.

Joey Olson, quien vestía una camiseta de los Rams de Los Ángeles, comentó que una de las partes divertidas del draft fue ver las diferentes playeras de los equipos que usaban los fanáticos.

“Es divertido ver la diversidad y la pasión que la gente tiene por sus equipos”, dijo Olson.