Un juez de Carson City dictaminó el viernes que los cargos de falsificación contra los seis llamados "electores falsos" de Nevada pueden proceder a un tribunal superior, una decisión que surge a casi cinco años de esfuerzos Republicanos para revocar las elecciones de 2020 en Nevada a favor del Presidente Donald Trump.

La decisión del Juez de Paz Derek Dreiling significa que los seis acusados ​​serán procesados ​​en el tribunal de distrito, lo que está programado para el 27 de octubre.

En audiencias preliminares, el juez debe decidir si hay pruebas menores o marginales de que los acusados ​​cometieron los delitos en cuestión. Aun así, debe haber pruebas suficientes que hagan probable alguna teoría, dijo Dreiling el viernes.

En su fallo, Dreiling indicó que fue "la decisión más difícil que he tenido que tomar en mi carrera", pero que la evidencia favoreció estrechamente a la fiscalía.

Abogados de los acusados ​​declinaron hacer comentarios el viernes. La fiscalía general tampoco emitió comentarios porque el caso sigue pendiente.

La audiencia incluyó testimonios y horas de interrogatorios a cargo de un investigador de la fiscalía general y un alto funcionario electoral estatal. Un video, obtenido mediante citatorio judicial, también mostró a los seis acusados ​​firmando certificados que otorgaban a Trump los seis votos electorales de Nevada.

El entonces candidato Joe Biden derrotó a Trump por cerca de 33,000 votos en Nevada en 2020, pero en varios estados surgió un plan para anular los resultados basándose en afirmaciones infundadas de un fraude electoral masivo.

El estado argumentó que los acusados ​​falsificaron documentos cuando afirmaron falsamente ser los electores del estado. La falsificación es un delito grave de categoría D, que conlleva una penalidad de entre uno y cuatro años de prisión. La clave del caso es si se falsificaron los documentos firmados y si los acusados ​​tenían “intención de defraudar” al firmar los certificados.

Algunos de los Republicanos más prominentes de Nevada se encuentran entre los electores falsos, incluyendo el Presidente del Partido Republicano de Nevada, Michael McDonald, y el Integrante del Comité Nacional Republicano, Jim DeGraffenreid. Los otros tres acusados ​​son el Expresidente del Partido Republicano en el Condado Clark, Jesse Law; el Vicepresidente del partido estatal, Jim Hindle III; Shawn Meehan y Eileen Rice.

Todos los acusados ​​estuvieron presentes durante la audiencia, la primera vez que esto ocurre en casi dos años de procedimientos legales.

La audiencia se realizó 10 meses después de que la oficina del Fiscal General de Nevada, Aaron Ford, presentó cargos por falsificación en Carson City.

El estado inicialmente intentó procesar a los electores falsos en el Condado Clark, pero un juez descartó el caso el año pasado tras determinar que no era una jurisdicción apropiada. Esa decisión está pendiente ante la Corte Suprema de Nevada, que escuchó argumentos orales en agosto.

Argumentos legales

El argumento del estado se enfocó en la ceremonia de firma que tuvo lugar frente a la Legislatura de Nevada el 14 de diciembre de 2020, el mismo día en que los electores Demócratas del estado emitieron sus votos a favor de Biden y Kamala Harris, entonces candidata a la vicepresidencia.

Pero la defensa argumentó que los documentos no eran falsificados. La verdadera falsificación, según la defensa, habría implicado alterar documentos para los verdaderos electores del estado.

La fiscalía citó a dos testigos el jueves. Gran parte del testimonio se enfocó en información previamente pública, como la ruta de los documentos firmados, que se enviaron al juez federal de mayor rango en el estado, a la oficina del secretario del estado, al vicepresidente y a los Archivos Nacionales.

“El mero hecho de que ellos enviaran esos documentos a las agencias correctas demuestra que había una intención” de defraudar, señaló la fiscal Alissa Engler.

Los abogados de los acusados ​​argumentaron que no tenían intención de defraudar y que los documentos firmados no tenían validez porque no incluían el sello estatal ni las firmas del secretario de estado y del gobernador. Los certificados que firmaron los verdaderos electores Demócratas contenían esta información.

Tensiones 

La tensión en la audiencia se enfocó en la decisión de la fiscalía de no obligar a declarar a Kenneth Chesebro, abogado de la campaña de Trump, considerado el autor de los falsos planes electorales. Chesebro ha cooperado con investigadores estatales.

“Nos engañaron”, dijo el abogado defensor Richard Wright, quien representa a McDonald.

La fiscalía argumentó que no tenía obligación de cumplir con el citatorio.

En última instancia, la fiscalía quiso que el juez retrasara el procedimiento para que Chesebro o su abogado pudieran testificar, pero él declinó.