Esta nota fue traducida al español y editada para mayor claridad a partir de una versión en inglés que aparece en The Nevada Independent.

Conforme la economía de Nevada se continúa recuperando de la pandemia, la oficina de finanzas del Gobernador Steve Sisolak está pidiendo a las agencias estatales que propongan recortes del 12 por ciento en sus presupuestos para cada año del bienio 2021-2023.

Este viernes, la oficina de finanzas de Sisolak indicó que envió un memorándum a las agencias del poder ejecutivo para conocer sus propuestas sobre las reducciones mientras él continúa trabajando en el presupuesto que va a recomendar a la Legislatura el próximo año.

El estado también está monitoreando mientras el panel de economistas Foro Económico predice con cuántos ingresos fiscales tendrá que trabajar el estado en el bienio que empieza en julio del 2021.

“Igual que las familias de Nevada, el Estado debe presupuestar con lo que tenemos frente a nosotros en nuestra situación actual mientras continuamos monitoreando las proyecciones y actualizaciones”, dijo Sisolak en un comunicado. "Como gobernador, continuaré trabajando con nuestros socios federales para abogar firmemente por la financiación de ayuda directa y flexible para los gobiernos estatales y locales para que podamos continuar el trabajo esencial para proteger la salud y la seguridad de todos los nevadenses".

La solicitud de propuestas para los recortes de presupuestos se da luego de que Nevada agotó su fondo de reserva para días difíciles [Rainy Day Fund] de más de $400 millones de dólares, y después de que los legisladores se reunieron durante el verano para cerrar una brecha presupuestaria de más de $1 billón para el año fiscal.

De acuerdo con la oficina del gobernador, se está pidiendo a las agencias que hagan un recorte del 12 por ciento de los niveles que aprobó la Legislatura durante la sesión del 2019 para el presupuesto del año fiscal 2021.

La imposición de restricciones por parte del gobierno que continúan limitando la capacidad en negocios y eventos, combinado con la duda por parte de los consumidores para viajar durante la pandemia, han llevado a que el volumen de visitantes en Las Vegas esté a casi la mitad de lo que registró hace un año.

Los impuestos a las ventas — el mayor impulsor de ingresos para el estado — bajaron un 10 por ciento año tras año en agosto, mientras que los ingresos por concepto de juegos y apuestas tuvieron un descenso de un 22 por ciento en septiembre año tras año.

"Todos los estados continúan enfrentando impactos devastadores en sus presupuestos como resultado de la recesión por el COVID-19, y Nevada no es la excepción", señaló la oficina de Sisolak en un comunicado. "Por eso el Gobernador Sisolak se une a sus homólogos de todo el país para pedir al Congreso un plan de recuperación de fondos sólido y multianual para los estados y territorios".