Esta nota fue traducida al español y editada para mayor claridad en una versión en inglés que aparece en The Nevada Independent.

Dentro de un improvisado cuarto de hospital, estudiantes aprenden cómo ponerse guantes y atuendo médico. Algunos practican cómo administrar Resucitación Cardiopulmonar (RCP) para asegurarse de que la profundidad de las compresiones sea la adecuada. Otros usan un dispositivo de entrenamiento con ultrasonido para observar hígados y riñones simulados dentro de un maniquí.

Todos se encuentran en el Centro de Simulación Clínica de Las Vegas, un local de capacitación cercano al Centro Médico Universitario que comparte espacio con la Escuela de Enfermería de la Universidad de Nevada Las Vegas (UNLV) la Escuela de Enfermería de Nevada State College y la Escuela de Medicina de la Universidad de Nevada.

Ninguno de ellos es estudiante de primer año de enfermería ni de medicina; son alumnos de preparatoria.

Este 15 de julio, por primera vez y durante toda una semana, UNLV realizó un campamento de enfermería para 30 estudiantes recién graduados, y del tercer y último año de preparatoria, para mostrarles los pros y contras de una carrera en esa área. 

Es parte de un esfuerzo para abordar la escasez de personal para de atención médica en Nevada. 

Unos 980,000 nevadenses viven en áreas de Falta de Profesionales de la Salud de Atención Primaria, lo que significa que enfrentan barreras en el acceso a servicios preventivos de rutina que podrían ayudarlos a mantener una buena salud y no terminar en el hospital. 

El primer día del campamento comenzó con RCP, capacitación en primeros auxilios y un curso para detener hemorragias. Otras actividades incluyeron visitas a UMC, acompañar a enfermeras en su jornada laboral, y a estudiantes de enfermería de UNLV.

Mary Bondmass, decana asociada de la Escuela de Enfermería de UNLV, dijo que su objetivo con el campamento es motivar a jóvenes estudiantes interesados ​​en el campo de la salud a quedarse en Nevada para que realicen su educación superior.

Bondmass agregó que su parte favorita del campamento era ver el "momento del foco [que se prende] cuando al final los estudiantes ven que están haciendo bien las cosas".

Anna Cosby, estudiante de primer año de UNLV, dijo que tiene varios familiares en el área de la enfermería, que siempre ha sabido que se quiere dedicar a esa profesión, que gracias al campamento ya había aprendido mucho, y que agradecía la disposición del personal para responder sus preguntas.

Victoria Tarango, estudiante de último año de Rancho High School, dijo que al principio quería ser neurocirujana, pero que ahora está considerando ser enfermera.

Troy Corbin, estudiante de último año del College of Southern Nevada (CSN) comentó que la enfermería "siempre ha parecido agradable", pero que nunca había pensado seriamente en esa área como una carrera. Sin embargo, después de unos días en el campamento, dijo que ya había aprendido mucho y que ahora está muy interesado.

Los profesores de UNLV están entusiasmados con lo que el campamento podría significar para el futuro de la institución, ya que, a partir de este otoño, la Escuela de Enfermería planea expandir su programa de pregrado a 216 estudiantes distribuidos anualmente en tres generaciones, lo que representa un aumento del 50 por ciento desde el otoño de 2017.

Tricia Gatlin, decana asociada de la escuela de enfermería, elogió el éxito que ha tenido el programa en colocar inmediatamente a los estudiantes en empleos relacionados, y agregó que la escuela tiene una tasa de bolsa de trabajo del 100 por ciento dentro de los tres o cuatro meses posteriores a la graduación.

Gatlin también reconoció que una escuela no puede resolver completamente la escasez de personal de salud del estado, pero dijo que "al tener enfermeras preparadas y calificadas, podemos hacer una gran diferencia en nuestra comunidad".