Varias órdenes ejecutivas relacionadas con inmigración que firmó Trump son intencionalmente imprecisas, pero han inquietado a varios Demócratas que representan a Nevada en el Congreso.

Las implicaciones de la radical agenda de inmigración de Trump, que incluye una campaña de deportación masiva y suspender el asilo, podría tener un efecto significativo en Nevada.

En sus primeros dos años como fiscal general de Nevada, el Demócrata Aaron Ford hizo frente 33 veces a políticas del entonces Presidente Donald Trump.

El presidente Donald Trump tomó medidas para poner fin a una política de inmigración conocida como ciudadanía por derecho de nacimiento cuando ordenó la cancelación de la garantía constitucional que establece que los niños nacidos en Estados Unidos son ciudadanos independientemente del estatus de sus padres.

Los cambios de política relacionados con inmigrantes indocumentados — ya sean del congreso o del poder ejecutivo — tienen el potencial de afectar a Nevada, que tiene el mayor porcentaje de trabajadores indocumentados en su fuerza laboral de cualquier estado.

La sede local del Consulado de México en Las Vegas, oficina que ella dirige, representa a ese gobierno en el exterior y es dirigido por la Secretaría de Relaciones Exteriores de esa nación.

Lombardo, junto con otros gobernadores Republicanos, excepto el mandatario de Vermont, Phil Scott, dijo que está listo para “utilizar todas las herramientas” a su disposición para prevenir la inmigración ilegal.

¿Qué promesas hizo Trump a los nevadenses durante sus visitas al Estado de Plata? Algunas tendrían consecuencias particulares en Nevada, que tiene la mayor proporción de inmigrantes indocumentados en la fuerza laboral de cualquier estado.

Como presidente del subcomité de Seguridad Nacional en el Comité de Asignaciones, el Congresista Mark Amodei tiene la tarea de financiar las agencias que el Presidente electo Donald Trump planea desplegar en su campaña de deportaciones masivas.

Además de separar a seres queridos, defensores de la inmigración dicen que una campaña de deportación masiva podría ser muy perjudicial para la economía y el tejido cultural de Nevada.

Una auditoría estatal del 2017 encontró que solo tres personas no ciudadanas habían votado en las elecciones de Nevada en 2016. Votar o intentar votar como no ciudadano es un delito grave en Nevada.

Por más de una hora, participantes del evento expresaron sus quejas acerca del estatus de la situación actual.

Ya que el Expresidente Donald Trump y la Vicepresidenta Kamala Harris proponen tomar medidas enérgicas contra la inmigración ilegal, la mayoría de los nevadenses apoyan la apertura de más vías de ciudadanía legal para personas indocumentadas, según nueva encuesta.

Veinticinco familias se reunieron con su familia este fin de semana a través de Corazón de Plata, un programa de reunificación familiar creado por la Federación de Zacatecanos.

Varias quejas citaron problemas para que los detenidos tuvieran acceso a servicios de salud — desde ser ignorados por personal médico, hasta un paciente que recibió una inyección accidental de insulina.

La decisión de un juez de Texas de bloquear temporalmente un programa de la administración del Presidente Joe Biden que ofrecía un camino para la residencia legal a cientos de miles de cónyuges indocumentados de ciudadanos estadounidenses no fue exactamente una sorpresa para activistas latinos en Nevada.

Desde el 2021 no se ha permitido que el programa acepte nuevas solicitudes y actualmente enfrenta retos en la corte en siete estados.

Sin impuesto por ingreso individual en Nevada, la mayoría de los pagos de impuestos de las personas indocumentadas provino del impuesto a la propiedad o ventas de servicios públicos, productos domésticos y gasolina, entre otros.

En una orden ejecutiva dada a conocer este martes, el Presidente Joe Biden anunció que los cónyuges indocumentados de ciudadanos estadounidenses que cumplan con ciertos criterios legales estarán protegidos de la deportación mientras buscan la residencia legal.

Demócratas de Nevada están haciendo un llamado para que se tome más acción en políticas fronterizas y de inmigración, pero quieren que la administración Biden tome la iniciativa — un reconocimiento implícito de que un acuerdo de inmigración en el Congreso es imposible, al menos en un año electoral.