Esta nota fue traducida al español y editada para mayor claridad a partir de una versión en inglés que aparece en The Nevada Independent.

Los funcionarios de salud en el Sur de Nevada dicen que están preocupados por la alta tasa de infecciones por COVID-19 en la comunidad latina, una tendencia que creen está impulsada por factores como una mayor propensión entre los hispanos a vivir en hogares multigeneracionales, y tener trabajos públicos que no se pueden hacer de forma remota.

Las cifras más recientes publicadas por el Distrito de Salud del Sur de Nevada muestran que el 27 por ciento de quienes han sido hospitalizados por el virus — 373 personas — son hispanos, mientras que el condado en general es 31 por ciento latino.

Por el contrario, los pacientes anglos representan el 33 por ciento de las hospitalizaciones (456 personas), pero el 42 por ciento de la población del condado.

"Pasamos mucho tiempo juntos y somos muy cariñosos entre nosotros y muy cercanos en nuestras interacciones", dijo el miércoles el Doctor Luis Medina García en una conferencia de prensa bilingüe. "Y esto complica la transmisión del virus".

Los funcionarios de salud agregaron que quienes viven en hogares grandes y multigeneracionales — en ocasiones por necesidad financiera — ofrece más oportunidades para transmitir la enfermedad, especialmente a los más vulnerables debido a su edad. Casi ocho de cada 10 muertes en el Condado Clark corresponden a personas de 65 años o más.

Medina García también dijo que la falta de acceso a la atención médica puede empeorar el efecto del coronavirus, especialmente si hace que alguien posponga la atención médica hasta que su condición se deteriore.

Pero la autoridad de salud dijo que no tenía datos a mano acerca de qué subgrupos dentro de la población hispana del Condado Clark fueron los más afectados.

“No hay manera de que te pueda decir cuántas personas hispanas se recuperaron pronto o no, porque son datos que no tenemos disponibles y que en muchos casos están protegidos por las leyes de privacidad del paciente”, dijo. “Pero en general, la respuesta ha sido buena. Sí han habido muertes, pero en comparación con otros estados, Nevada creo que ha tenido una casuística muy favorable”.

Funcionario electos, incluyendo el Comisionado del Condado Clark, Tick Segerblom, exhortaron a las personas a hacerse la prueba y enfatizaron que ese examen no solo es gratuito y no requiere seguro médico, sino también que quienes administran la prueba no preguntarán sobre el estado migratorio de una persona.

El Doctor Fermín Leguen, jefe del distrito de salud, dijo que los funcionarios notaron hace casi un mes que el número de casos reportados entre latinos era bajo.

“Eso motivó entre otras cosas que el distrito de salud y el condado empezaran a implementar iniciativas tratando de traer las pruebas más cerca a la comunidad hispana”, dijo. “Al incrementar la oferta de pruebas a la población, las posibilidades de diagnóstico de esta enfermedad aumentan”.

Con ese fin, el distrito de salud tendrá sitios de pruebas temporales en las próximas semanas en el consulado mexicano, el consulado salvadoreño y el Centro Cristiano El Shaddai en Las Vegas.

Leguen dijo que no pudo decir si hay evidencia de que la gente ha evitado hacerse la prueba debido a su estatus migratorio. La autoridad de salud no pregunta a las personas acerca de ese estatus y evita decir cosas que den la percepción de que recopilan la información.

Además de la parte relacionada con la salud, los latinos han reportado más obstáculos económicos como resultado de la pandemia que la población en general.

En una encuesta realizada a fines de marzo, el centro Pew Research encontró que el 49 por ciento de los hispanos informaron que a ellos o alguien en su hogar, les habían recortado su salario o se habían quedado sin trabajo, mientras que el 33 por ciento de la población en general reportó esos impactos.