Piden leyes que ofrezcan soluciones permanentes para beneficiarios de DACA
“DACA se termina”, dice un aviso escrito con letras rojas en la página de Internet del Servicio de Inmigración y Ciudadanía de los Estados Unidos.
Tras la cancelación del programa en septiembre pasado, DREAMers, políticos en Washington, líderes, y miembros de la comunidad de Las Vegas, piden al Congreso que antes de fin de año aprueben una iniciativa de ley ‘limpia”, o libre de negociaciones que impliquen obtener fondos para construir un muro fronterizo a cambio de que unos 800,000 jóvenes protegidos por DACA puedan obtener su estancia permanente en el país.
La Administración Trump permitió seis meses para que el Congreso diseñe una solución permanente, pero sin una reacción obvia en los primeros dos meses que ya han transcurrido desde la eliminación de DACA, los DREAMers están preocupados por su futuro y el de sus familias.
Ese es el panorama en el que actualmente se encuentran los DREAMers, jóvenes inmigrantes indocumentados quienes fueron traídos por sus padres a los Estados Unidos cuando eran niños y sin culpa propia.
“Me entraron los nervios. Tengo miedo de que me quiten nuestra casa”, dijo a este medio Audrey Peral, una inmigrante de Las Vegas cuyo estatus migratorio aún no se define.
Con lágrimas en los ojos, Peral agregó: “Pienso en mi hijo, en mi vida, y en todo lo que podría perder si esto no va hacia la dirección correcta”.
Bajo los ojos de la ley
En Nevada, unos 13,000 DREAMers están inscritos en DACA, el Programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA, por sus siglas en inglés), que les otorga un número de Seguro Social, permiso de trabajo y alivio de la deportación.
Estos jóvenes y sus familias ahora se plantean nuevos escenarios de vida después del pasado 5 de septiembre, cuando el Procurador General de los Estados Unidos, Jeff Sessions, dio a conocer la eliminación del programa.
“El Departamento de Justicia no puede defender este tipo de excesos”, dijo Sessions al anunciar el fin del programa. “Somos un pueblo compasivo y somos un pueblo de leyes. Pero no hay nada compasivo en fallar al hacer cumplir las leyes de inmigración”.
El gobierno federal permitió a los solicitantes, cuyos permisos expiran entre ahora y el 5 de marzo de 2018, renovar su permiso de trabajo por dos años más, siempre y cuando lo hicieran antes de este 5 de octubre.
Tras el anuncio, el presidente Trump publicó en su cuenta de Twitter que el Congreso tenía seis meses para legalizar DACA “algo que la administración de Obama no fue capaz de hacer”, y agregó que, en caso de que los legisladores no lleguen a una solución para DACA, volvería a revisar el tema.
Demócratas y activistas pro inmigrantes dijeron que existía un acuerdo con Trump de que el proyecto de ley Dream Act 2017 no incluiría fondos para construir el muro en la frontera México-Estados Unidos, pero el presidente dijo en su cuenta de Twitter que no se había llegado a tal concesión y que, a cambio de consentimiento, tendría que someterse a votación un acuerdo para un “masivo” sistema de seguridad en la frontera.
No deal was made last night on DACA. Massive border security would have to be agreed to in exchange for consent. Would be subject to vote.
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) September 14, 2017
El Congreso podría ayudar a dar paso a una de las varias propuestas que fueron puestas sobre la mesa, incluyendo Dream Act 2017, Bridge Act, American Hope Act y Recognizing America’s Children Act, que ofrecen a los DREAMers algún tipo de protección contra deportaciones, y que podrían brindar un camino hacia la ciudadanía.
Cada uno de los representantes de Nevada ante el Congreso está involucrado en al menos una de estas iniciativas.
Un voto clave: El del Senador Heller
El Senador Republicano por Nevada Dean Heller, no siempre ha sido un gran partidario de DACA, pero ha declarado oficialmente que apoya el programa y está co-patrocinando una iniciativa de ley que daría a los inmigrantes indocumentados una ventana de tres años de protección provisional y codificaría varias partes de la orden ejecutiva para convertirla en ley.
Los Republicanos controlan el Senado y los Demócratas que apoyan DACA necesitan a más Republicanos como Heller que se unan al programa para conseguir que se apruebe.
En una entrevista realizada la semana pasada por el periódico Las Vegas Review Journal, Heller dijo que sería difícil votar por un proyecto de DACA sin ningún tipo de restricciones, y que aunque iba a presionar para que se agregara el tema de seguridad fronteriza y el sistema de verificación de empleo E- Verify, aun así estaría abierto a votar por una iniciativa de ley que no incluyera esas restricciones.
“El programa DACA nació de una orden ejecutiva del presidente Obama y es otro ejemplo de por qué es importante que el Congreso debata y aborde cualquier política que altere significativamente las leyes de nuestra nación”, dijo Heller en septiembre a través de un comunicado al Reno Gazette-Journal. “Aunque sigo preocupado por la forma en que DACA cobró vida, he dejado en claro que apoyo el programa porque a las personas trabajadoras que vinieron a este país sin culpa propia como son los niños no se les debe mostrar inmediatamente la puerta”.
Como miembro de la Cámara de Representantes en 2010, Heller se opuso a una versión del DREAM Act, que su campaña llamó “un curita que no solucionará un problema que es más grande”.
Desde entonces Heller ha moderado su postura acerca de la inmigración. En una entrevista con NBC News el pasado agosto, dijo que se oponía a la rescisión del proteccionismo del DACA.
“Me gusta la ley actual, la forma en que funciona y la sigo apoyando”, dijo. “Vamos a ayudar y apoyar a estas personas y encontraremos un camino para que puedan convertirse en ciudadanos de los Estados Unidos si eso es lo que quieren hacer”.
Heller también votó en contra de abrir el debate sobre una iniciativa de ley que acabaría con la financiación para DACA en 2015, fue el único senador Republicano que lo hizo. También fue uno de 11 senadores Republicanos que no firmaron un documento en apoyo a la impugnación legal del programa DACA que hizo el estado de Texas.
Heller también es co-patrocinador de la Ley BRIDGE, una iniciativa de ley bipartidista presentada en abril para permitirles a personas elegibles o que han recibido beneficios bajo el programa DACA continuar viviendo en los Estados Unidos sin temor a ser deportados.
Durante una charla con el grupo Hispanics in Politics en Las Vegas a fines de agosto de este año, Heller dijo que estaba orgulloso de haberse unido a otros 13 Republicanos en apoyo a una iniciativa de ley de reforma integral de migración en 2013 aunque él tuvo presión por esto.
“No quiero ver a las familias separadas. Quiero asegurarme de que nuestra gente honesta y trabajadora no sea castigada injustamente. Quiero asegurarme de que a los jóvenes no se les niegue el Sueño Americano”, dijo. “Pero las fronteras abiertas y las ciudades santuario y un desprecio por las leyes de nuestra nación sólo crea caos y reduce los salarios”.
Luego de darse a conocer la cancelación de DACA, la Senadora Demócrata por Nevada, Catherine Cortez Masto, dijo que la decisión de terminar DACA estuvo guiada por la “xenofobia y los mitos”.
Cortez Masto y otros legisladores de su partido han sido defensores de DACA y continúan presionando para que aprueben leyes que solucionen el estatus permanente de los jóvenes DREAMers.
Nerviosismo en la comunidad inmigrante
Tanto los miles de inmigrantes de los 10 países amparados por el Estatus de Protección Temporal (TPS, por sus siglas en inglés) que el pasado 6 de noviembre fue cancelado para Nicaragua y fue objeto de otros cambios, como los beneficiarios de DACA, han expresado su preocupación ante la posibilidad de quedar expuestos a la deportación.
Padres indocumentados se preguntan qué pasará con sus hijos, pues no los quieren dejar solos en este país, y los hijos, a su vez, tienen temor de que sus padres sean deportados.
Esa es una de las angustias más grandes para Audrey Peral. A punto de graduarse como licenciada en psicología en UNLV, y un con un hijo de 10 años, dijo que las recientes noticias en materia de inmigración le han causado inquietud.
Peral, de 29 años, y quien participó como oradora en una rueda de prensa organizada el pasado jueves por líderes y activistas en Las Vegas, comentó en entrevista que nació en México y que sus padres, quienes eran indocumentados, la trajeron a los Estados Unidos cuando era bebé.
Peral indicó que actualmente se encuentra en proceso de regularizar su estatus a través de la visa VAWA (Acta de Violencia Contra la Mujer, VAWA, por sus siglas en inglés) pues sus abogados le recomendaron que era la mejor opción para su caso. A pesar de no estar bajo la cobertura de DACA o el TPS, comentó que se considera una DREAMer y se solidariza con todos los inmigrantes como ella.
“La gente necesita entender quiénes somos. No estamos aquí para causar daño, sino para las oportunidades por las que nuestros padres lucharon tanto”, comentó Peral.
Los cambios recientes en las políticas migratorias afectan directamente a Teresa, quien el jueves pasado asistió a un foro comunitario organizado por Hermandad Mexicana Transnacional para conocer si ella y su familia tienen alternativas.
Teresa, quien solicitó mantener sus apellidos en el anonimato, dijo al finalizar el evento que debido a los cambios más recientes en DACA y el TPS ahora su familia de cinco integrantes pudiera no tener opciones para quedarse en los Estados Unidos, donde han vivido por 20 años.
Frotando sus manos con nerviosismo, Teresa comentó que es una inmigrante indocumentada originaria de México, su esposo es salvadoreño y está amparado por el TPS, dos de sus hijos tienen DACA, y una de ellas, aunque es ciudadana americana, no puede solicitar estatus legal permanente para sus padres, ya que es menor de 21 años.
“Ese es mi temor ¿Qué va a pasar si nos quedamos sin DACA y TPS?”, dijo Teresa. “Es deprimente y desesperante. Me entró como una ansiedad. Tenemos poquito ahorrado por si tenemos que irnos nosotros dos [ella y su esposo] pero nos queda esperar, a ver qué dicen”.
De los sueños a la realidad
Pero grupos de activistas, inmigrantes y políticos coinciden en que ya es tiempo de pasar leyes con soluciones permanentes.
Por ese motivo, el pasado jueves por la tarde William McCurdy, Presidente del Partido Demócrata de Nevada y Asambleísta por el Distrito 6; Edgar Flores, Asambleísta Demócrata por el Distrito 28, miembros de la comunidad inmigrante y representantes de grupos progresistas como SEIU Nevada Local 1107, PLAN (Progressive Leadership Alliance of Nevada, por su nombre en inglés) realizaron una rueda de prensa a las afueras del edificio Lloyd D George de la Corte de los Estados Unidos.
“Necesitamos un Dream Act limpio [sin restricciones o libre de negociaciones] y necesitamos proteger el TPS para aquellos que resultarían afectados”, dijo McCurdy.
Durante el evento, los organizadores resaltaron las contribuciones económicas y educativas de los DREAMers, y beneficiarios del TPS, y además exigieron una legislación que ponga fin a alivios temporales, pues se trata de un asunto más allá de lo partidista.
“No es una conversación Republicana o Demócrata”, dijo el Asambleísta Demócrata por el Distrito 28 de Nevada, Edgar Flores. “Se trata de los Estados Unidos”.
En una entrevista con The Nevada Independent al término del evento, Flores, dijo que los DREAMers son una pieza clave en la fuerza de trabajo de este país, y que era tiempo de asegurarse que el Congreso pase una ley con miras a la ciudadanía tanto para los DREAMers como para los beneficiarios del TPS.
“Hay un grupo de personas que están peleando por ustedes y así continuaremos haciéndolo hasta que su estatus temporal cambie a algo que sea real”, señaló Flores.