Esta nota fue traducida al español y editada para mayor claridad a partir de una versión en inglés publicada en The Nevada Independent.

El Gobernador Steve Sisolak extendió hasta mediados de octubre la actual moratoria de desalojo de Nevada, mientras se intenta acelerar el lanzamiento de un programa de mediación para ayudar con el pago de rentas  atrasadas y agregar $10 millones de dólares para cubrir pagos de apoyo a inquilinos residenciales.

A unas horas de que se permita la reanudación legal de los desalojos residenciales por falta de pago de renta este 1 de septiembre, la oficina del gobernador Demócrata anunció en una conferencia de prensa este lunes en Las Vegas que la congelación de los desalojos continuará durante otros 45 días, y agregó que su personal había estado trabajando hasta el lunes por la mañana tratando de encontrar un camino a seguir sin una extensión.

“En estos momentos en que el termómetro marca los 108 grados, y la gente está luchando por salir adelante, y no tenemos la resolución federal para el desempleo que se prometió”, dijo el mandatario estatal, “me sentí obligado a pensar que lo mejor para las personas que viven en Nevada es que extendamos esto 45 días más y todos tratemos de trabajar juntos".

La decisión generó críticas por parte de Nevada Realtors, quienes dijeron simpatizar con los inquilinos que enfrentan el desalojo, pero la extensión da pocos recursos a propietarios en pequeño y que la medida se anunció con menos de un día de anticipación.

"Estamos muy decepcionados con la decisión del Gobernador Sisolak de extender la moratoria de desalojo en el estado 45 días más", afirmó el presidente de la asociación, Chris Bishop. "Reconocemos que miles de nevadenses pueden estar enfrentando el desalojo porque han perdido su trabajo o se han reducido sus ingresos desde que empezó esta pandemia y la recesión económica en marzo... Sin embargo, esta extensión crea una gran dificultad para miles de propietarios en Nevada, que ahora no podrán cobrar la renta que se les debe durante al menos otros 45 días".

La medida se produce en medio de los esfuerzos actuales para establecer un programa de mediación de desalojo residencial. El mes pasado, la Legislatura aprobó un proyecto de ley que crea el programa como una forma de evitar una acumulación de casos judiciales de desalojo; sin embargo, funcionarios de la Suprema Corte indicaron hace poco que dicho programa probablemente estará en funcionamiento hasta finales de octubre.

Sisolak afirmó que se anulará el requisito de 60 días para establecer reglas para que el programa acelere su implementación. También indicó que espera que se aprueben las regulaciones y que el programa comience antes de finales de septiembre.

Mientras tanto, funcionarios han remitido a las personas a un programa de mediación general en el Condado Clark que se ocupa de una amplia variedad de disputas, desde cuestiones salariales en el lugar de trabajo, hasta tensiones entre vecinos por los ladridos de perros.

Más allá de los juzgados, la extensión tiene como objetivo permitir que el estado se ponga al corriente con el cúmulo de solicitudes de desempleo; aunque un nuevo “grupo de ataque" al desempleo liderado por la ex líder de la Asamblea Barbara Buckley está trabajando para determinar la gravedad del rezago y remediarlo.

Un programa de asistencia para la renta, financiado con fondos federales con $60 millones de dólares disponibles en todo el estado, ha dejado de aceptar solicitudes temporalmente en el Condado Clark.

Hasta el pasado miércoles, el Condado Clark había asignado a 732 hogares $1.7 millones en asistencia para el alquiler. Los funcionarios siguen procesando otras 5,300 solicitudes en la cola y se han visto abrumadas por más de 30,000 consultas sobre el programa.

Mientras tanto, el jefe de la Autoridad de Vivienda de Reno reportó que hasta la semana pasada se habían pagado $22,000 en ayuda para el pago de la renta; solo 11 solicitantes habían recibido una parte de los $5 millones de asistencia por parte de la autoridad. De más de 1,600 solicitantes, solo 232 habían completado los pasos de seguimiento necesarios para completar la solicitud.

Sisolak señaló que su personal reorganizó el dinero del apoyo federal para el coronavirus y encontró suficiente para sumar $10 millones de dólares al programa de apoyo al alquiler, que recorta los cheques de la renta a los propietarios para favorecer a los inquilinos que se han atrasado con este pago. 

Guinn Center for Policy Priorities hizo sonar la alarma a principios del verano acerca de que entre 118,000 y 142,000 hogares podrían tener dificultades para pagar su alquiler en septiembre, y la falta por pago de renta en Nevada podría llegar a $1.1 billones si el desempleo entre los inquilinos se mantiene en 38 por ciento.

Pero las extensiones de la moratoria de desalojo han frustrado a los propietarios en pequeño, muchos de los cuales son dueños de unos pocos inmuebles, y están sintiendo la presión financiera de mantenerlos a flote, en algunos casos, después de cinco meses sin recibir un solo pago.

Si bien la situación del coronavirus en Nevada ha mostrado cierta mejora, Sisolak también indicó que está "extremadamente preocupado" por el próximo fin de semana del Día del Trabajo e instó a los habitantes a evitar reuniones masivas donde el virus podría propagarse fácilmente.

“Este es el momento de redoblar esfuerzos y hacer aún más: asegurarse de llevar un cubre-bocas, y estar socialmente distanciados”, dijo. “No hagan una parrillada en su patio trasero con 50 o 100 de sus amigos más cercanos todos reunidos. Traten de que sus reuniones sean pequeñas. Traten de mantenerse lo más seguros posible este fin de semana”.

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